La botella de Besos es un juego diseñado para ayudar a los padres a promover y fomentar la expresión de los sentimientos de amor en momentos en los que no tenemos contacto físico. ¿A dónde van a parar esos besos que no pudimos darles. Aquellos que se fabricaron en el corazón pero no pudieron llegar, aquellos que desde el enfado no pudieron recibirse... Para respuestas imposibles, pregúntale a un niño. Te dirá que se guardaron en una botella viajera capaz de surcar todos los mares. Aquí la tenéis. Vuestra botella llena de besos. De papel mágico, por supuesto.

El que puede encontrarse bajo la almohada, el que puede esconderse en una agenda escolar, el que puede atravesar puertas cerradas. Podréis guardárselo en la mini mochila incluida en el juego, para que ese beso viaje con él, con ella. Y esté donde esté pueda acompañarle como el discreto amuleto que guarda el más eterno de los mensajes. Sí. Ese que surca cualquier mar. El que también nos calma los temores que todos los padres sentimos alguna vez. Y como el amor es recíproco, dos botellas. Para que vosotros podáis recibir los suyos.